Fingers de pollo
Los dedos de pollo son uno de esos platos irresistibles que gustan a grandes y pequeños. Su combinación perfecta entre un rebozado crujiente y un interior tierno y jugoso convierte cada bocado en una explosión de sabor y textura. Ideales como entrante, para compartir o como opción informal, los dedos de pollo son ya un imprescindible en la carta de cualquier restaurante.
Este plato contiene:



Origen y Tradición
Aunque el pollo rebozado es una preparación con siglos de historia —documentada en recetas europeas desde la Edad Media—, la versión moderna de los dedos de pollo tal como los conocemos hoy tiene su origen en la gastronomía estadounidense de mediados del siglo XX.
Inspirados por el éxito del pollo frito sureño y adaptados al concepto de comida rápida , los fingers de pollo surgieron como una forma fácil y cómoda de disfrutar del pollo frito, pero en formato bocado . En lugar de utilizar piezas enteras de pollo, se comenzó a cortar en tiras alargadas, rebozarlas y freírlas hasta conseguir esa textura crujiente y dorada tan característica.
En poco tiempo, los fingers de pollo cruzaron fronteras y se popularizaron en bares, restaurantes y hogares de todo el mundo. Su éxito se debe a su sabor universal, su textura irresistible y su versatilidad a la hora de acompañarlos con salsas y guarniciones.